martes, 26 de marzo de 2013

Agua que has de beber…


En este artículo trataremos algunos temas referidos al agua potable. Distintos métodos de potabilización de agua en el campo, higiene, derretimiento de nieve y algunos consejos sobre transporte de agua a bordo.

En una salida corta, quizás alcance con el agua que llevemos de casa, una botella de 3L o algún botellón nos alcancen para cubrir las necesidades propias y de un grupo durante un par de días, pero si estamos en un viaje más largo y no encontremos agua para beber, cocinar, higienizarnos o lavar heridas, tendremos que utilizar algún método de potabilización de agua.
Por suerte, en Argentina hay muchas regiones con agua potable o semi potable que requieren poco tratamiento y los desechos industriales solo se limitan a los grandes ríos alrededor de las grandes ciudades. Sin embargo, en zonas remotas, el agua puede estar contaminada con protozoos (ej, Giardia, Cryptosporidium), bacterias (E. coli, E histolytica) o virus. Estas formas de vida son de distinto tamaño, polaridad, resistencia y de acuerdo a estas características será más o menos sencillo deshacerse de ellos.

Recipientes
El agua debe estar siempre a mano para beber mientras remamos sino, nos deshidratamos. Puede estar en cubierta, dentro del cockpit o con nosotros en el chaleco.

Lo más normal, son las botellas tipo “coca” que a medida que consumimos el líquido, las aplastamos para que ocupen menos, no haga ruido por el movimiento del líquido (es muy molesto) y no se giren en el bote. Sin embargo, hasta el día de hoy, lo que mejor me ha resultado es la botella del enjuague bucal “listerine”. Es excelente. Plana (no se gira), de boca ancha, transparente (deja pasar los UV y veo el contenido) y carga medio litro de agua. La llevo en los elásticos porta material o entre el asiento y el lateral del bote dentro del cockpit. La de 250 cm podría llevarla cómodamente en el chaleco. La única desventaja es que debo usarla unos días para sacarle el gusto a enjuague bucal.

Botella de Listerine
Las botellas tipo “Nalgene” son excelentes para el campamento. Tienen boca ancha que permite una carga muy facil y podemos preparar café, te, llevar sólidos o cualquier cosa en ellas. Su gran utilidad: son excelentes bolsas de agua caliente para meter dentro del saco de dormir! Las contras, son: es engorroso llevarlas en el bote para tomar porque son cilíndricas y dentro del bote, ruedan y no pueden comprimirse.

Botella tipo "Nalgene"
Los recipientes tipo “vejiga” tienen la ventaja que el agua está siempre “a mano” y bebemos mientras remamos, lo que es extremadamente conveniente en alta temperatura. La contra de estos sistemas de hidratación es que no vemos cuanto queda de agua si la llevamos en la bolsa de hidratación en la espalda y que para recargarla necesitamos, o quitarnos el chaleco o pedirle a alguien que nos asista. Tampoco me gusta llevar tanto peso en el chaleco y la manguera, cuando se congela, se tapa.
Hay recipientes de agua flexibles como los “dromedario” de MSR. Cargan 4 o 6 L de agua y no ocupan espacio en el bote. Excelentes para el campamento como reservorio del agua.

Potabilización de agua
Hay diversos métodos de potabilización, siendo algunos complementarios. Aquí comentaremos los más simples para realizar en el campo con materiales que podamos conseguir en Argentina.

Filtros Comerciales
Hay filtros comerciales que pueden usarse para potabilizar el agua y debemos saber que filtran y que no filtran y eso debiera estar en las instrucciones, pero el filtrar y tomar el agua es casi inmediato. Los buenos filtros incorporan resinas de yodo o de cloro y carbón activado para filtrar protozoos, bacterias y sustancias químicas pero quizás no filtren los virus, por el tamaño del poro del filtro. Si los filtros son solo de carbón (purificadores) adsorben sustancias químicas, peno no todos los microorganismos. Su desventaja es que son caros, delicados y es difícil conseguirlos en Argentina. Las mejores marcas, katadyn y MSR.

Decantación
La sedimentación separa las partículas grandes por gravedad. Dejamos decantar en un recipiente por un tiempo (una hora) y luego volcamos la parte transparente descartando el precipitado. Al sobrenadante (la parte transparente), normalmente habrá que someterla a otro tratamiento para purificar.

Floculación
Permite decantar las partículas más pequeñas por gravedad cuando las sometemos a un producto químico. Las partículas se adhieren formando coloides y decantan o las podemos pasar por un filtro donde quedan retenidas. Un agente coloidal es el sulfato de aluminio que se agrega una cucharada por cada 5 litros de agua al que dejamos reposar para luego separar. Nuevamente, trataremos a la parte transparente con otro método de purificación. Se puede usar también carbón activado como adherente de partículas.

Filtración
El agua turbia, con materia orgánica, sedimento o coloides, puede pasarse por un filtro de café (de papel o de tela) o un paño (remera, medias) para sacar las partículas más grandes (todo depende del tamaño del poro y el de las partículas) y hacer que el agua sea más transparente y tenga mejor gusto.


Halógenos
Halógenos: Tintura de Yodo y pastillas de Cloro. Botella Nalgene

Los halógenos (Cloro y yodo o “lavandina” y “tintura de Yodo”) desinfectan virus, bacterias y quistes protozoarios (excepto Cryptosporidium). La gran ventaja es que son de fácil obtención (farmacia, supermercado) y que hace falta poca cantidad de halógeno para potabilizar agua y que la encontramos en distintas formas (lavandina, pastillas de cloro, cristales de Yodo, tintura de Yodo). La desventaja es que a altas concentraciones tiene mal sabor.
La cantidad de halógeno a agregar es función de la concentración y del tiempo de exposición en el agua (en un litro de agua 2 gotas de iodo dejadas 60 minutos es equivalente a 4 gotas dejadas 30 minutos), la temperatura (agua más fria requiere más halógeno) y la turbidez del agua (el agua con impurezas orgánicas puede reaccionar con el halógeno formando un compuesto inactivo por lo que es necesario aumentar la concentración de halógeno).
Para mejorar el sabor, podemos agregar menos halógeno y dejar reposar por mas tiempo o agregar saborizantes (tang).
Actualmente, los nuevos derivados del cloro (dioxido de cloro y otros) son inodoros e incoloros, pero son difíciles de conseguir en Argentina.


Aquamira: Dióxido de Cloro y ácido fosfórico.

Tintura de Yodo o lavandina? La acción desinfectante del cloro es dos o tres veces más lenta que la del yodo y la lavandina casera, como no está hecha para desinfectar agua, no tiene controles de calidad para ello. Además, es más inestable y reacciona más con otras partículas formando reactivos inactivos. Entonces, a menos que no se tenga a mano otra cosa, es mejor utilizar Yodo (no Yodo povidona, sino tintura de Yodo) que lavandina. Además, tiene un sabor más tolerable.

Luz Ultra Violeta

Últimamente se está utilizando luz UV para la purificación de agua. El sistema más utilizado es el Steripen, que es un “lapicito” a pilas o con carga USB que emite luz ultravioleta. Se utiliza en recipientes de medio y un litro dejándoselo un tiempo de exposición. Es ideal para potabilizar en agua de canilla de procedencia dudosa, lo que nos evita la “diarrea del viajero” tan común en aguas con virus y bacterias o cuando debemos ahorrar combustible. Si el agua está muy contaminada, de todas formas yo agrego un par de gotas de Yodo…

A la derecha, Potabilizando con SteriPEN
Otro mito… el tomar el agua corriente del arroyo, no la estancada. Últimamente se demostró que es más conveniente en un arroyo tomar el agua de superficie que no está en movimiento. Ahí, los rayos ultravioleta del sol habrán inactivado las formas de vida, no así en el sector que esté corriendo.
Un filtro UV casero lo tenemos con botellas transparentes dejadas al sol. Las dejamos por unas 8 hs y desactivarán las formas de vida. Si las dejamos más tiempo, ocurre una “reactivación” haciendo al agua nuevamente no potable.

Calor

El calor es un  método muy eficiente para deshacerse de formas de vida en el agua contaminada. El único problema es que necesita de combustible, y si es para beber, debemos dejarla enfriar. Si potabilizamos al fuego, además el humo le da sabor al agua. 


Uno de los mitos de “hervir el agua” es que hay que dejarla hervir 15 minutos si el agua está contaminada (la leche se pasteuriza a 71ºC). Las enzimas de los microorganismos dejan de tener actividad a poco más que la temperatura ambiente y a esa temperatura se desnaturalizan. El llevarla hasta el hervor es una indicación de la temperatura y nos da la seguridad de que llegamos a una temperatura conveniente. A nivel del mar  el hervor es a los 100º  y se mantendrá a esa temperatura un minuto después, o 15. Por eso no tiene sentido gastar más tiempo y combustible en mantener el agua a la misma temperatura. Las ollas a presión nos ahorran tiempo y combustible.
Utilizar el calor para potabilizar agua es un buen método para cocinar, tomar bebidas calientes, higienizarse o preparar agua para beber de uso no inmediato.

¿Que sistema utilizar?
Depende de la calidad del agua, de los materiales que tengamos a disposición y cuales no. Para usar el calor necesitamos combustible. Si el agua está muy contaminada necesitaremos métodos combinados. Todo depende de las preferencias personales, pero  los únicos métodos realmente eficientes son, la utilización del calor y una combinación de filtración-halogenación. Estas dos técnicas nos eliminan casi todos los microorganismos que podamos encontrar en el agua contaminada.

Higiene
Como norma general, cuando estamos en una travesía (siempre): todo el mundo debe lavarse las manos o utilizar un agente antibacteriano después de ir al baño o al manipular alimentos!! 
Considerar, hacer una letrina si vamos a estar varios días en el lugar y no utilizar como baño los alrededores de la carpa o la cocina.
Mantener la higiene es una buena forma de evitar una diarrea en el grupo! Lo que también nos requrirá más agua potabilizada…

Derretir nieve
En ambientes fríos donde nieva, quizás necesitemos derretir nieve para que el agua esté disponible. Para eso necesitamos tiempo y combustible. Debemos recolectar nieve limpia y tomar la precaución de que los baños estén bien alejados del campamento. Podemos usar un remo como pala para la carga de nieve y una bolsa grande para no tener que salir a cada rato a buscar nieve. Es mejor derretir por la noche para tener el agua lista por la mañana para el desayuno y la travesía del día!
Con cada nueva carga de nieve en la olla, conviene dejar un poco de agua para que la nieve pase más rápido a la fase líquida. No hace falta hervirla, solo nos interesa el cambio de estado.

Si no vamos a estar muchos días en esas condiciones, no es necesario agregar sales al agua de nieve. Las sales que necesitamos las ingerimos con la dieta o con jugos tipo tang o gatorade. Sin embargo, si necesitáramos hidratar a alguien deshidratado, habría que agregar sales de hidratación o una cucharada de azúcar y media de sal por litro de agua. 
 
Asegurar una buena provisión de nieve limpia

Siempre que salgamos a una zona remota deberíamos tener algún elemento para potabilizar el agua. Un gotero de tintura de yodo no ocupa espacio y nos puede sacar de una situación delicada, así como los mínimos elementos para encender un fuego.

El uso del sentido común para mantener la higiene también nos mantendrá alejados de enfermedades e inconvenientes que puedan complicarnos una expedición.

lunes, 11 de marzo de 2013

Botiquín de primeros auxilios


Cuando estemos en una travesía puede ocurrir que surja alguna emergencia médica o lesión que deberemos resolver hasta llegar a un centro médico de atención definitiva. 

En principio debiéramos identificar el problema para intentar resolverlo (saber administrar los primeros auxilios) y también debiéramos tener los elementos para resolver o disminuir el problema (llevar un botiquín de primeros auxilios con nosotros) y en caso de necesidad, evacuar a la víctima (saber tomar la decisión en tiempo y forma y saber trasladar a la víctima).

Estamos aquí...¿como lo resolvemos?
Como ya dijimos anteriormente, conocer de primeros auxilios es fundamental para quienes transiten en zonas remotas. En general, nadie vendrá a buscarnos y nosotros debiéramos resolver y seguramente trasladar a las víctimas a un centro de atención definitiva. Es por eso que es tan importante llevar los elementos mínimos para una atención y traslado y esto se hace más importante cuanto más lejos estemos de la atención médica.

El botiquín
Las primeras consideraciones son qué llevar, donde llevarlo y quien lo lleva y todo esto requiere de una cuidadosa planificación.



Distintos botiquines para zonas remotas

Quien:
Cada miembro de la travesía o expedición debiera llevar su propio botiquín de primeros auxilios por si llegaran a separarse. Si el viaje así lo amerita, podría prepararse uno de “expedición” con material más específico o de baja probabilidad de uso. Como norma general y si es una emergencia, atenderemos a la víctima en primera instancia con nuestro botiquín y luego, los “mantenimientos” y utilización de material se hacen con el botiquín de la víctima. Podremos necesitar el nuestro para más adelante…

Donde:
Como primera medida, el botiquín de primeros auxilios debe estar en un recipiente estanco. LOS KAYAKS NO SON ESTANCOS. Nuestra actividad se realiza en el agua y si por algún motivo, las tapas de los tambuchos de algún kayak son estancas, más tarde o más temprano, dejarán de serlo. Así como el aire entra a nuestros pulmones, el agua entra a los botes.

Dentro de este recipiente estanco estará nuestro botiquín con los elementos, que debe tener el tamaño acorde a lo que estemos llevando y el tamaño del botiquín es función de:

-         Tiempo (días de travesía y tiempo de traslado al centro de atención definitiva)
-         Cantidad de personas
-         Lugar (Clima, flora, fauna, exposición del ambiente acuático)
-         Consideraciones especiales

Esto es, a más tiempo y más personas, más probabilidades de que ocurra algo, y considerar el tiempo que nos puede llevar la evacuación hasta el centro de atención definitiva.
Dependiendo del lugar tendremos en cuenta las posibles lesiones ambientales de ese sitio (mordeduras, golpe de calor, playa rocosa en los desembarques, aguas vivas…).
Dentro de las consideraciones especiales, deberemos considerar si somos líderes de grupo (guías, instructores, baqueanos)  o solo es una salida con amigos y tenemos las mismas responsabilidades unos que otros.

Aquí también tendremos en cuenta la medicación específica de las enfermedades particulares de los miembros de la travesía (asma, alergias, hipertensión, diabetes, cardíacos). El integrante que presente alguna enfermedad deberá llevar consigo su medicación y deberá instruir a quienes lo acompañan sobre cuando, como y a que dosis recibe su medicación habitual. También los acompañantes deberán informarse sobre síntomas que indiquen descompensación de su enfermedad y modo de tratar a la misma.
Teniendo en cuenta estas consideraciones, es conveniente que armemos nuestro botiquín en “kits” específicos para que todo esté ordenado. Es por eso que un bolso con muchos compartimentos es preferible a un bolso grande con un solo espacio. En este caso, todo se mezcla y no encontramos nada cuando lo necesitemos. El orden es fundamental para ganar tiempo (y así se mantiene más prolijo, cómodo y no se llena todo de sangre….).

En el kayak, el botiquín en su recipiente estanco debiera estar “a mano”. Cuan a mano depende de nuestra planificación diaria. Si lo necesitamos “realmente a mano” debiera ir dentro del cockpit o en el tambucho diario si lo tenemos (day hatch) o lo guardamos en último lugar dentro de alguno de los tambuchos para su empleo inmediato si fuera necesario.

Qué llevar:
Partiendo de la base de las mismas consideraciones

-         Tiempo (días de travesía y tiempo de evacuación)
-         Cantidad de personas, (con sus necesidades específicas y las nuestras)
-         Lugar (con sus características particulares)

Y evaluando a partir de nuestros conocimientos que es lo que puede ocurrir

-         Lesiones ambientales
-         Trauma
-         Patologías

Y todo esto en un marco de BIOSEGURIDAD

Es por eso que armaremos un botiquín para cada travesía, porque cada travesía tiene consideraciones particulares. Es así que podemos tener un “botiquín genérico” y le agregamos o quitamos “kits” de acuerdo a las necesidades particulares de cada viaje.


Podremos también incluir un botiquín mas pequeño dentro del principal para salidas cortas durante nuestra expedición así no llevamos tanto peso como sería el hacer un trekking de dos horas desde el campamento para ver el glaciar Tyndall. Nos llevamos el más chico con lo necesario y dejamos el principal en la base.

Botiquín "individual"

Los elementos mencionados a continuación son solo para darles una idea de un botiquín estándar (y como dijimos, cada travesía es diferente). Cada uno debiera armar el suyo a conciencia y sabiendo qué lleva y por qué lo lleva.

Bioseguridad: Guantes descartables, mascarilla de RCP, anteojos.

Kit de heridas y trauma: 

  • Férula SAM
  • Venda elástica
  • Jeringa de irrigación
  • Yodo Povidona
  • Gasas
  • Vendas
  • Vendaje triangular
  • Pinzas
  • Tijera de Trauma
  • Encenderor
  • Tela adhesiva
  • Tela adhesiva hipoalergénica
  • Duct tape

Kit de quemaduras: 

  • Gel de aloe vera
  • Gasas furacinadas
  • Platsul
  • Medicación específica

Kit de ampollas: 

  • Segunda piel y el kit de heridas o el de quemaduras.

Kit de purificación de agua: 
Filtros, halógenos, UV.

Kit dental de emergencia: 
Clavo de olor, pegamento para dientes.

Equipo de primeros auxilios
Manual de primeros auxilios
Fichas de seguimiento médico (fichas “soap”)
Anotador y elemento para escribir
Tensiómetro
Estetoscopio
Oxímetro
Termómetro
Paks de calor (tipo “hot hands”)
Manta aluminizada

Es conveniente agregar un manual  de primeros auxilios al botiquín
Medicamentos
Debemos tener en cuenta
-         ¿que medicamentos puedo necesitar?
-         ¿para que situaciones están indicados?
-         ¿como se administran?
-         ¿cuales puedo administrar yo y cuales solo bajo autorización medica?
-         consideraciones locales (endémicas) de la zona a recorrer
-         patologías particulares de los miembros de nuestra expedición
-         fecha de vencimiento de los medicamentos
-         Temperatura de almacenamiento
Como regla general, guardar los prospectos

Medicamentos a considerar
-         Tratamiento de heridas y quemaduras
-         Fiebre, dolor e inflamación (Ibuprofeno, paracetamol, aspirina, Diclofenac, ketorolac)
-         Vómitos y Nauseas (metoclopramida)
-         Diarrea (pastillas de carbón y sales de rehidratación oral)
-         Alergia y anafilaxis (adrenalina 1:1000 y Difenhidramina, loción antialérgica)
-         Congestión Nasal (Loratadina-pseudoefedrina)
-         Oftalmológica (solución fisiológica, Eritromicina en gotas oftálmicas)
-         Broncoespasmos y crisis asmática (Salbutamol, Dexametasona
-         Antibióticos (Cefalixina, Amoxicilina, Eritromicina, Norfloxacina)
Los antibióticos deben ser indicados por un medico, pero en zonas remotas se puede recibir autorización médica para administrarlo por radio o teléfono mientras se realiza la evacuación.

Consideraciones finales
En nuestra actividad siempre podemos encontrarnos con algo imprevisto. Qué hagamos para resolverlo puede ser la diferencia entre el todo y la nada y no es ese el mejor  momento para darnos cuenta lo que debiéramos haber aprendido antes…

El “saber remar” no solo incluye remar para adelante sin caerse o ser el campeón nacional de rol…

Es salir al agua cada día y volver cada día… cómo lo hagamos es completamente personal…pero volver a casa…

Y eso requiere de un conocimiento profundo de las técnicas de seguridad: rescate, primeros auxilios, evaluación del riesgo, planificación, navegación, comunicaciones

y la práctica conciente de estas técnicas es lo que lo hace más divertido…


Es fundamental entrenarse en primeros auxilios para una mejor respuesta en caso de necesidad


Saludos!!